Las organizaciones de hoy se enfrentan a un reto sin precedentes, a una constante competencia y a una época en la que el avance de la tecnología empuja hacia la innovación y el cambio continuo para la consecución de los objetivos generales. Dichos retos, de la mano de la tecnología, han hecho que las compañías estructuren planes para adaptarse a una nueva normalidad que demanda mucha más atención en las relaciones humanas. Es por ello que necesitan el mejor desempeño de todos sus colaboradores para avanzar y evolucionar con la misma rapidez que el mercado lo hace.
Para que los colaboradores alcancen su máximo potencial es fundamental e indispensable que las organizaciones velen por garantizar su bienestar. Un estudio global de compromiso realizado por ADP Research Institute concluyó que solamente el 16% de los colaboradores están totalmente comprometidos con su trabajo, lo que representa un problema para las organizaciones. Aumentar este porcentaje de compromiso se logra a partir de un Ambiente Laboral óptimo y del bienestar general de los trabajadores. Esto último se ha convertido en una prioridad para las personas, tanto en su vida personal como en el ámbito laboral, por lo que trabajar en ello se ha vuelto una inversión para las compañías.
El bienestar es un factor primordial para que las organizaciones tengan resultados que marquen la diferencia ya que, de acuerdo con investigaciones del Instituto iOpener, los colaboradores felices son el doble de productivos. En consecuencia, cada vez más las empresas adoptan métodos, prácticas o estrategias para favorecer esto. Las organizaciones pueden empezar a gestionarlo día tras día, desde detalles como encender la cámara durante las videollamadas si se está realizando teletrabajo, un café o un saludo en la mañana, pausas activas, hasta beneficios como horarios flexibles, vacaciones, oportunidades de ser escuchados, celebraciones de fechas especiales, momentos de esparcimiento y demás iniciativas que hagan sentir a las personas como en casa.
Todos son parte del mismo barco
Más allá de los beneficios que la compañía le puede ofrecer a sus colaboradores, hay un elemento que es clave en la construcción de dicho bienestar: la participación de todos los integrantes de la organización, ya que si todos están a gusto con el entorno, se genera más seguridad y confianza tanto en los colaboradores como en los procesos. Lo anterior se logra trabajando y fortaleciendo las relaciones con los demás, los vínculos de valor y la creación de espacios apropiados para el trato con otros.
Pablo Claver, experto en felicidad en el trabajo y autor del libro Por fin es lunes, expresa que las personas trabajan aproximadamente 10.500 días en su vida.
Para lograr dicho objetivo y avanzar en el proceso, los líderes juegan un papel fundamental y tienen una gran responsabilidad, ya que desde su rol se logran potencializar la comunicación, la confianza, la justicia, la credibilidad y el Ambiente Laboral. Adicionalmente, si se logra lo mencionado, las dinámicas entre colaboradores y líderes pueden verse altamente impactadas de forma positiva a través de un estilo de liderazgo inspirador que motive constantemente a las personas a dar lo mejor de sí, a hacer su trabajo con energía y entusiasmo de tal forma que se logren mejores resultados para la organización.
En conclusión, asignar recursos y gestionar estrategias orientadas a construir y fortalecer ambientes de trabajo en donde se promueva el bienestar como eje transversal de la organización, favorece la experiencia de los colaboradores en sus compañías y lugares de trabajo, así como en el logro de objetivos y metas organizacionales. Por ello, hacerlo es una inversión que en el mediano y largo plazo se verá reflejada en todos los niveles de una compañía, apalancando aspectos clave como la productividad, innovación, creatividad, adaptabilidad al entorno y retención de talento. Es así como se evidencia que esta gestión incrementa la motivación y el compromiso de las personas, haciendo que vean su trabajo como una oportunidad para encontrar la satisfacción y realización, tanto profesional como personal. Así esto, y como expresó Albert Schweitzer: “El éxito no es la clave de la felicidad. La felicidad es la clave del éxito”.
Si quieres conocer cómo impulsar el bienestar organizacional y llevar a tu compañía al siguiente nivel, conversemos aquí.